De los casi 3 mil millones de dólares que se esperan invertir, el 65% provendrá del sector privado
El Gobierno chileno anunció hoy un proyecto de ley que mediante incentivos tributarios busca duplicar para el año 2014 la inversión en investigación y desarrollo (I+D), una de las metas del programa del presidente Sebastián Piñera.
"El crecimiento del PIB (producto interior bruto) está fuertemente asociado a la innovación que permite aumentar la productividad y la competitividad", afirmó al fundamentar la iniciativa el ministro de Economía, Juan Andrés Fontaine.
Consideró que con el proyecto, que será enviado la próxima semana al Legislativo, "damos un paso importante para cumplir nuestro compromiso de mejorar las condiciones productivas para alcanzar el desarrollo hacia el año 2018".
Fontaine dijo que el actual nivel de inversión de Chile en I+D es "muy bajo", de un 0,4 por ciento del PIB (equivalente a unos 900 millones de dólares), frente a un 2,3 por ciento promedio de los países de la Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económico (OCDE), de la que el país es miembro desde hace un año.
"Del total de la inversión en I+D en Chile, sólo un 44 por ciento corresponde a las empresas privadas y el desafío es llevarla a un 65 por ciento, similar al promedio de los países de la OCDE", manifestó el ministro.
En lo principal, explicó, el proyecto triplica, desde 390 mil a 1,2 millones de dólares, el máximo del crédito tributario y considera la entrega de un beneficio de este tipo equivalente al 30 por ciento del gasto total del proyecto, tanto si es realizado por la propia empresa o por un proveedor externo.
La iniciativa prevé que estarán afectos al beneficio tanto los gastos corrientes como los de capital, de manera tal que el gasto en infraestructura también podrá deducirse como gasto del proyecto, añadió.
Las empresas podrán acogerse al beneficio por un período de hasta diez años desde que se genera el gasto, concluyó. EFE
"El crecimiento del PIB (producto interior bruto) está fuertemente asociado a la innovación que permite aumentar la productividad y la competitividad", afirmó al fundamentar la iniciativa el ministro de Economía, Juan Andrés Fontaine.
Consideró que con el proyecto, que será enviado la próxima semana al Legislativo, "damos un paso importante para cumplir nuestro compromiso de mejorar las condiciones productivas para alcanzar el desarrollo hacia el año 2018".
Fontaine dijo que el actual nivel de inversión de Chile en I+D es "muy bajo", de un 0,4 por ciento del PIB (equivalente a unos 900 millones de dólares), frente a un 2,3 por ciento promedio de los países de la Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económico (OCDE), de la que el país es miembro desde hace un año.
"Del total de la inversión en I+D en Chile, sólo un 44 por ciento corresponde a las empresas privadas y el desafío es llevarla a un 65 por ciento, similar al promedio de los países de la OCDE", manifestó el ministro.
En lo principal, explicó, el proyecto triplica, desde 390 mil a 1,2 millones de dólares, el máximo del crédito tributario y considera la entrega de un beneficio de este tipo equivalente al 30 por ciento del gasto total del proyecto, tanto si es realizado por la propia empresa o por un proveedor externo.
La iniciativa prevé que estarán afectos al beneficio tanto los gastos corrientes como los de capital, de manera tal que el gasto en infraestructura también podrá deducirse como gasto del proyecto, añadió.
Las empresas podrán acogerse al beneficio por un período de hasta diez años desde que se genera el gasto, concluyó. EFE
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