Heberto Alvarado Vallejo
Una proyección de 300 mil nuevas adopciones diarias, con más de 25 fabricantes de dispositivos móviles concentrados en él, hacen de Android la plataforma de mayor crecimiento del mundo de los Smartphone y ahora de las tabletas.
Una proyección de 300 mil nuevas adopciones diarias, con más de 25 fabricantes de dispositivos móviles concentrados en él, hacen de Android la plataforma de mayor crecimiento del mundo de los Smartphone y ahora de las tabletas.
Muchos analistas, hemos descrito cómo el sistema operativo de Google inicia su dominio del mercado, haciéndose fuerte y dejando pasmados a muchos fabricantes que vieron en la plataforma el oxígeno necesario para mantenerse vigentes en el competido y despiadado mercado tecnológico.
Sin embargo, Android no es la panacea y mucho menos se acerca a serlo. A poco más de dos años de su llegada al mundo comercial el sistema operativo móvil de Google demuestra sus fallas, y cómo la premura, en muchos casos, ha jugado en contra del entusiasmo que ha puesto la corporación más grande de internet en su evolución.
Desde China nos revelan datos interesantes que ponen en duda el prestigio de Android y esa bandera que caracterizó su lanzamiento inicial: un sistema abierto, libre para que cada fabricante haga adecuaciones.
El primer punto, Google asegura que Android es abierto, sin embargo, los acuerdos que realiza con los fabricantes parten de la comercialización del Android Market; hay dispositivos que al no tener acuerdos con casa matriz no pueden utilizar la tienda de aplicaciones y otros servicios como el Google Maps. Es decir, se ata la plataforma al hardware y esto, obviamente pone en las manos de Google el negocio del fabricante de teléfonos o tabletas; algo que es lo suficientemente desventajoso para muchas marcas.
Pero esto no es todo el problema. La diversidad de versiones, las propias mejoras o adecuaciones que han hecho algunos fabricantes que han creado su propio sabor de Android, colocan a los desarrolladores de aplicaciones para el android market en un punto muerto, pues muchas de sus creaciones tienen problemas con algunos interfaces de comunicación con el hardware del móvil (kernell) y claro está limita las posibilidades de éxito de sus creaciones.
Estas realidades explican en buena medida por qué algunos fabricantes apostaron por desarrollar sus propios sistemas operativos, e incluso adquirir algunos. El ejemplo más palpable es HP, que compró Palm y su gran posesión: el sistema operativo WebOS; con ello desarrolló una plataforma robusta muy bien apreciada que nutre a sus Smartphone y su tableta, la TouchPAD.
Esas fallas del mundo Android, deberán corregirse en poco tiempo. Larry Page, nuevo CEO de Google deberá acelerar esa integración de todos los sabores del sistema operativo y garantizar que sean interoperables con diversas plataformas.
Estos retos de Google, deberán venir acompañados de una política de más apertura y también deberán asumir los avances que otros gigantes tengan, como el caso de RIM con su Playbook OS, Nokia y Microsoft y HP, sin descuidar a MeeGo.
Entre alguna de ellas estará la segunda gran plataforma móvil del futuro, pues la primera seguirá siendo iOS de Apple que lanzará en junio la versión 5 de su apreciado sistema operativo.
En definitiva Android seguirá siendo una promesa y Apple una realidad
No hay comentarios:
Publicar un comentario